Insensata adrenalina
que corres por mis venas,
cada vez que la sensatez
abandona mi ser.
Y es que la fuerza del deseo,
a la sombra reclama,
una vida mas plena
y alejada de penas.
En el cambio de la vida,
he sentido adrenalina,
y cada respiración,
me ha devuelto a la vida.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario